Los Roobin son una excelente opción para fomentar la creatividad y la imaginación de niños y grandes. Son hechos a mano a partir de residuos textiles, dándole un segundo uso a telas que de otra manera irían al relleno sanitario.
Son duraderos y de materiales seguros para estar en contacto con los niños. Además, apoyas a la economía local al adquirir estos juguetes únicos y originales.